domingo, 2 de mayo de 2010

Ahora estoy en viña, en el viña de la ciega maría luisa bombal que por cierto no era ciega en absoluto. Esta ciudad después de todo es fascinante aunque parezca una falsa maqueta de programa del que usted elija, a mi ya todo eso me da igual, el mundo entero me da igual en cierta medida, ando HOPPIPPOLLA, nací otra VEZ, estaba muerto y ahora volví para reencarnar en un nene jejeje, como me gustan estos cuerpos, los de los evolucionados monicacos, que de mono algo grueso y candente me queda vieja.
Cuantos paréntesis en nuestras vidas, cuanto tiempo soñando y cuanto para hacerlos reales, es loco también ir cumpliendo años, saber que estás más viejo e ir reconociéndote en ese cuerpo con esos pensamientos inquietudes maneras
múltiples accidentes
Cuantas muertes durante una vida
Cuanta cursilería en las esquinas
Denme a mí la vida en medio de los ciegos
La lucidez de los esclavos
La palabrería más redundante en charlatanilandia
La cosificación de la cosa
La penetración más profunda en las membranas
Los puntos g y d y fucsia
Mientras yo pintaba las mujeres gemían deliciosas, permíteme excitarme en la polla de tu planeta distorsionado, hacerme la simpática pero ser cochina en pensamientos y delirios deseosos.
Mientras estaba allí no podía llevar mi imaginación secreta al límite del escándalo, podía tentar a las ánimas en el universo prendido.
A veces me saltaba el choro del más puritano soplo sexual en partículas del aire, el sexo se sentía en el ambiente y penetraba todos nuestros poros. Sin embargo todos nos apegábamos a la costumbre, luego tantos gemidos eran el destronamiento y la llegada a ciudad dementis.
Protégeme de los rayos de luz, el sol está quemando directo, duelen los ojos y quedamos ciegos de mirar el centro

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